domingo, 2 de junio de 2013

Universitarios y sobradamente preparados.

    Formar parte de la vida universitaria pasados los cincuenta
años es una experiencia única, pero graduarse en el Paraninfo de la Universidad de Alcalá de Henares, como lo hice yo junto a mis compañeros el pasado Martes donde defendieron su doctorado ilustres de nuestra historia como Lope de Vega, Quevedo o Ignacio de Loyola, como dice el anuncio, no tiene precio.

Humanidades Senior, es un estudio que te ayuda a entender mejor lo que te rodea cotidianamente y a veces no prestas atención: Arte, Literatura, Geografía o Cine.

Lo dijo, nuestro delegado en sus palabras de agradecimiento en el acto de graduación, “Los alumnos de los 3 cursos de humanidades senior, que con entusiasmo y perseverancia hemos adquirido los conocimientos para aceptar con dignidad y merecimiento la distinción académica que hoy nos otorga la universidad de Alcalá patrimonio de la humanidad.”

 
Tuvimos el privilegio de compartir este escenario con los compañeros de ciencias, que han realizado practicas en los laboratorios de la facultad.

Estos tres cursos de humanidades hemos compartido muchas cosas, hemos vivido y disfrutado.

Los profesores, Catedráticos en algunos casos, profesores de nuestros hijos o nietos en la “verdadera UAH” han compartido su tiempo y conocimientos con nosotros las tardes, durante tres años. Algunos además han sacado sus clases de las aulas, en visitas a las muy cercanas y a veces desconocidas profundidades de Madrid.

Otros nos han llevado el cine a las aulas, el cine y su historia y critica,claro. Tambien el teatro, disfrutando de obras de teatro en Madrid y en Alcalá y animándonos a acudir a exposiciones, conferencias y piezas teatrales en nuestra propia Guadalajara.

Profesores jóvenes, de nuestra tierra, defensores del patrimonio de la provincia de Guadalajara, profesores extranjeros, gracias, gracias a todos.
Hemos sido estudiantes, compañeros, amigos.

Hemos sido unos cincuenta, algunos no asistieron el Martes a este emotivo acto, algunos, por sus trabajos, en los últimos años de actividad profesional, por enfermedades o por motivos familiares han abandonado las clases antes de tiempo, que no el interés la amistad y las ganas de seguir aprendiendo.




Como decía aquel juego infantil, por mi, por todos mis compañeros, y por mi el primero:

Felicidades, enhorabuena Universitari@s!!!

El saber no tiene edad!!!